Parador de Gredos

El Parador de Gredos. Un lugar con encanto, para poder evadirse en la naturaleza, con un ambiente tranquilo, y un aire puro, que sentiremos nada más llegar, al respirar el agradable y puro olor del bosque, y pudiendo disfrutar de un espacio sin contaminación acústica, y con la melódica sinfonía de la naturaleza.

Rodeado de árboles, y unas vistas de ensueño, el Parador de Gredos se encuentra en las famosas montañas de Gredos, gigantes, en medio del Valle del Tormes, con una fluencia llena de pinos.

Este edificio de gran importancia turística, se mandó levantar por petición el Rey Alfonso XII, que poco después de su construcción, y de que se inaugurara el Patronato Nacional de Turismo, en 1982, se convertiría en el primer parador, en toda la cadena de paradores nacionales en España.

Dentro del edificio, se pueden apreciar pinturas y fotografías bien conservadas, haciéndonos viajar en el tiempo, representando a su vez hechos históricos como la redacción de la Constitución, o la unificación de la Falange. Hay mucho que disfrutar culturalmente en casi la totalidad de los paradores nacionales.

Dentro del edificio, podemos dirigirnos a la terraza, desde la cual obtendremos una vista inmensa de toda la sierra. Avistaremos las grandes montañas, todo un horizonte de naturaleza, paz y armonía.

Sin duda, es un lugar totalmente recomendado para ir, tanto solo, en pareja, o en familia. Donde vamos, El Parador de Gredos acogerá a los invitados de una manera hospitalaria.

Desde este punto, podemos tomar varias rutas, siempre recomendamos usar algún mapa informativo, con todas las actividades.

Es toda una oportunidad, poder entrar al bosque y disfrutar desde el corazón de Gredos, lo que nos regala ese momento. Lagunas de agua limpia, los picos de las montañas nevadas, sin olvidar que son las más altas de todo el sistema central.

Desde dentro, podremos aprovechar para sacar unas excelentes fotografías. Dispone de una fauna extensa, encontrándonos con algún animalito peculiar, como las ardillas.

Si somos rápidos, podremos obtener muy buenos momentos fotográficos, para el recuerdo.

Desde aquí, podéis disfrutar de la auténtica gastronomía de Ávila, que podréis tener el gusto de probar en el restaurante del parador. Es el más cercano, con precios asequibles, y abiertos durante todo el día.

Tendréis platos destacados como las judías, o también llamadas judiones. Gran tamaño, y excelente sabor.

No podemos dejar atrás, para los amantes de la carne, el gran y auténtico chuletón de ternera de Ávila. Dos platos, que no podéis dejar atrás.

MÁS INFORMACIÓN

A escasos kilómetros, tenéis una opción para poder alojaros. Se encuentra el Hostal Almanzor, un lugar muy hospitalario, y económico, totalmente recomendado.

En la otra punta, pero cerca del parador, nos encontramos con otro lugar para alojarnos. El Hostal Refugio de Gredos, ligeramente más estiloso que el Almanzor.

Para degustar los mejores platos de Ávila, nos podemos dirigir a un par de restaurantes, que recomendamos por su excelente atención, y sobre todo, la comida.

Tenemos La Casa Chica, que nos acogerán de una manera cordial, y nos ofrecerán platos gastronómicos típicos de Ávila. A un buen precio, y un sabor, para repetir.

A pocos metros, encontraremos el Bar Frutos. Un lugar más bien para ir de tapas. Ofrece una cantidad generosa, además de un ambiente acogedor, donde podremos pasar un rato agradable, con nuestra pareja, o familia.

Alejándonos a tan solo otros kilómetros, podemos encontrarnos con la Iglesia de San Benito Abad, un lugar para visitar, y poder tomar unas buenas fotografías.

Tenemos una estación de servicio, para antes de volver a la realidad, podamos repostar a un precio económico. La Estación de Servicio Gredos, que se encuentra antes de llegar al parador.

El Parador de Gredos, guarda algo mágico, sin duda, un lugar para repetir y animarse a conocer. Es uno de los paradores nacionales más solicitados y valorados.